La intensificación de la ganadería, es decir, la concentración de animales, tanto para la producción de leche como para la producción de carne, generó un problema: una mayor acumulación de residuos de producción. Estiércol, orina, otros piensos y otras camas podría significar un problema si el productor no sabe gestionarlo.
En los sistemas intensivos de producción láctea existe una alta producción de desperdiciar, y su destino apropiado debe diseñarse de manera que no sólo evite la contaminación ambiental, sino que también proporcione ganancias para el sistema de producción.
Una gestión inadecuada de los residuos de producción puede aumentar el riesgo de propagar enfermedades, como mastitis y enfermedades de las pezuñas. Esto también supone un riesgo para la salud humana y la salud medioambiental.
Una propiedad que no trata adecuadamente sus residuos seguramente tendrá una mayor incidencia de moscas y malos olores, lo que puede ser un problema ambiental y de salud laboral.
Así La gestión adecuada de los residuos agrícolas es fundamental para recibir la llamada saneamiento ambiental, que es producir con seguridad, calidad ambiental y seguridad de los trabajadores.
Oportunidades
Sin embargo, es importante resaltar que, si se gestionan bien, los residuos de producción representan un oportunidad. Cuidando adecuadamente la gestión de residuos se puede conseguir:
1) energía eléctrica
Esta propiedad, dependiendo del número de animales y de la tecnología utilizada, puede ser autosuficiente en la producción de energía, con perspectivas de, incluyendo, vender energía al concesionario.
2) Biofertilizante
Los residuos se pueden aplicar como biofertilizantes. La aplicación de biofertilizante ahorra hasta 25% de insumos externos (nitrógeno, fósforo y potasio). Este biofertilizante, si se maneja adecuadamente, se puede aplicar a cualquier producción, desde forrajes hasta otros cultivos agrícolas producidos en la finca.
Este dato fue proporcionado por el investigador de Embrapa Gado de Leite, Marcelo Otenio. Citó el ejemplo de la finca Agrindús, donde la aplicación de biofertilizantes reemplaza completamente la fertilización química con nitrógeno, y esto representa una enorme ganancia ambiental y económica.
El biofertilizante en forma líquida tiene la característica de ser más disponible para la planta, por lo que el césped no requiere ninguna fertilización química de otra fuente durante todo el año. En este caso, únicamente se realiza manejo agronómico de control de plagas y cosecha en el punto de corte determinado.
Puede encontrar más información sobre este tema en el curso en línea. Gestión de residuos en ganadería, del EducaPoint, presentado por otenio y registrado en la finca Agrindus. En el curso explica cómo se debe realizar el correcto manejo y disposición adecuada de los residuos del sector lácteo, en las diferentes escalas de producción, abarcando desde la limpieza de las instalaciones, los procesos recomendados para el tratamiento de los residuos y las formas en que se pueden aplicar. de forma económica y sostenible, con ganancias no sólo para el productor rural sino, principalmente, para el medio ambiente.
FUENTE: Educapoint